Es cierto que se vive una época compleja, sin embargo, ha habido tiempo suficiente para reflexionar y redefinir la forma en la que, como sociedad, celebramos la unión en pareja. La vida como la conocíamos ha cambiado radicalmente y la nueva realidad trae consigo nuevas reglas que afectarán el significado de las bodas.
La perspectiva de Paula Gamboa, directora de Marketing de Four Seasons Hotel Casa Medina, en Bogotá, es acompañada por el aliento que le infunde llevar a otro nivel el concepto Intimate Weddings, instaurado a escala internacional por la marca antes de la pandemia.
“Estamos creando toda una estrategia para proporcionar un servicio de wedding style aún más exclusivo, máximo para 10 personas, en el que integraremos de una manera muy audaz elementos indispensables para cumplir con el programa de salud y seguridad global ‘Lead With Care’ de Four Seasons, avalado por Johns Hopkins Medicine International, y aquellos decretados por las autoridades locales”, relata Paula a Forbes Life.
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Además, acentúa que, si bien la misión es preservar la salud de los novios y sus invitados, con la asesoría de profesionales se buscará crear la atmósfera perfecta para hacer de esos momentos algo realmente especial. “Una de las ventajas es que la mayoría de los espacios del hotel están habilitados con sensores para evitar el contacto con las superficies y el front keeping automatizado”.
El emblemático edificio de 1946, diseñado por el artista y arquitecto colombiano Santiago Medina Mejía, desde sus inicios ha sido una de las propiedades en la capital colombiana mayormente elegidas para celebraciones nupciales por su bello estilo colonial y ambiente cálido.
Hechas con el alma
Y es que cada vez son más las parejas que se decantan por hacer de su boda una experiencia muy personal, compartiéndola sólo con sus seres queridos más allegados; organizándola desde el corazón. Así, las bodas boutique también adquirirán mayor auge en el futuro.
El concepto boutique se define por el trato íntimo y personalizado, en el que se presta atención al más mínimo detalle. Toda oportunidad que haya para reflejar la personalidad de la pareja es siempre aprovechada. La calidad culinaria suele estar arriba del promedio y va más allá de sólo servir un platillo a la mesa individualizado; busca contar la historia de la pareja a través de la comida.
“Como industria nos estamos preparando no sólo en la forma de realizar los eventos, también en que todos los prestadores de servicio inmersos en el proceso trabajemos en conjunto para generar eventos que sean responsables y que protejan la vida humana”, refiere Satori Sochandamadou, presidenta de la Asociación Colombiana de Wedding and Event Professionals (Asocolwep) y, al respecto, cita la implementación del sello de bioseguridad SAFE4YOU.
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La especialista detalla que el primer paso fue desarrollar manuales para que cada proveedor cumpla de manera específica los protocolos: catering, floristas, alquiladores de vajillas, mobiliarios… y una gran lista, porque de acuerdo con Satori, CEO de The Blueprint Events, existen al menos 52 rubros implicados en la industria de las bodas en Colombia.
“Eso nos deja ver que la logística de un evento llevará mucho más tiempo que antes, porque debemos realizar una exhaustiva labor para higienizar cada elemento, monitorear la salud de los colaboradores y la de los invitados, tomar la temperatura al ingresar… Un sinnúmero de factores a considerar”.
De ahí que los organizadores deberán agendar un evento por día, y esto abre la posibilidad de elegir otras fechas y no únicamente los fines de semana, como comúnmente ocurría. De acuerdo con cifras de Asocolwep, antes de la contingencia, en el país se realizaban un promedio de 8,000 eventos al mes, mayormente bodas, más los acontecimientos alrededor: la despedida de solteros, la reunión con la familia, la tornafiesta…
“La contingencia ha sido una pausa fuerte en el camino, tristemente se han perdido muchos empleos, pero nos ha servido para replantear la forma de trabajar. Sólo las empresas y profesionales que sean capaces de responder a los nuevos lineamientos de higiene, harán la diferencia”, insiste Carolina Chaux, vicepresidenta de Asocolwep y miembro de Asociación de Consultores de Bodas y Eventos, ABC Latinoamérica.
Pero si hay algo que debe quedar claro, acentúa, es que cuidar la salud es una responsabilidad de todos, incluidas las parejas y sus invitados. Cumplir con todas las medidas de higiene, hoy en día es un acto de amor.
El punto de encuentro
La reactivación de los eventos será paulatina y todo reiniciará con petite comités. Los hoteles de lujo han sido los primeros en alistar su reapertura y será en sus espacios exclusivos donde comenzarán a realizarse bodas íntimas, donde la distancia entre las personas será vital. Poco a poco los eventos irán trascendiendo a espacios cada vez más abiertos y al aire libre.
Cartagena de Indias, siempre colorida, bella y romántica, desde hace una década se ha posicionado como uno de los destinos de bodas por excelencia. Y para Catalina Angulo, master planner y gerente general de Eleganza, esta tendencia se mantendrá con el desafío que implica la nueva realidad.
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Ubicado a seis horas de Cartagena, Santa Cruz de Mompox, declarado por la Unesco como Patrimonio de la Humanidad, es otros de los destinos que continuarán siendo apreciados en el futuro por las parejas que buscan algo fuera de lo convencional, lo mismo que Villa de Leyva, en Bogotá, o el Archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina.
Las especialistas en bodas sugieren que, por ahora, lo mejor es optar por sitios cercanos a los hogares y de fácil acceso para hacer frente a cualquier eventualidad.
“A pesar de la situación, las personas se siguen comprometiendo y queriendo celebrar su amor, por lo que vemos una recuperación importante durante el 2021. Vemos eventos con más políticas y permisos de operación, en cuestión a bioseguridad.
Y, por supuesto, parejas sintiendo que todo lo que las rodea es especial; viviendo el momento, sin prisas, ni presiones, ya sea en una reunión para dos o con sus seres más entrañables”, concluyeron las mujeres que lideran una industria con toda la disposición de seguir innovando y sobrepasar cualquier reto.
Forbes Staff | Sheila Ramírez